Cuerpos-Cuerdas. Traspasar el miedo. Prolongar la acción.

Artistas:

Curaduría: Albeley Rodríguez Bencomo

Investigación, gestión, producción y coordinación: Colectiva La Emancipada

Montaje: Ilowasky Ganchala

Video y fotografías: Stephany Arias Arias

Mediación educativa: Isabel Llaguno

La convocatoria recibió más de 60 postulaciones de artistas ecuatorianas y residentes, la selección fue compleja, sin embargo se llegó a la selección de doce artistas para este Cuarto Encuentro: Emilia González, Grafitodas, Elena Heredia, Paula Hinojosa, Kasumi Iwama, Isabel Llaguno, Sisa Morán, Maya Ponce, Glenda Rosero, Pamela Suasti, Karen Toro, Alexandra Trujillo. Así también dentro del proceso de curaduría colaborativa, la colectiva junto con la curadora realizaron una selección de artistas invitadas de larga trayectoria: Valeria Andrade (ECU), Identidad Marrón (ARG), Jenny Jaramillo (ECU), Magdalena Pino (ECU), Mujeres Públicas (ARG), Sandra Vivas (VEN). Y como un componente fuerte del encuentro, y de la gestión de la Colectiva La Emancipada se invitó a la artista e investigadora Marcela Barreiro (ECU) para presentar el trabajo de la artista póstuma Olga Beltrán (ECU).

Texto Curatorial

Traspasar el miedo implica salir de la parálisis y encontrar nuevas vías. Significa percatarnos de la necesidad de compartir tiempo y espacio para hacer, de lo común, la fuerza en sentidos inéditos y desconcertantes, capaces de transfigurar la desesperanza y de sacudir los límites predeterminados por las políticas dominantes.

 

Las mujeres y las disidencias sexo-genéricas han venido mostrando su capacidad de politización y movilización, para hacer sensible el descontento, el dolor, el duelo, la rabia y los deseos, incluso más allá de las fronteras puramente locales.

 

En estos lugares y movimientos, las propuestas artísticas han tenido un papel clave, que es el de producir un discurso honesto, que desborda la aridez de la retórica política, que señala al poder con valentía y desde modos que son simultáneamente frontales y escurridizos, en aquello que éste pretende acallar, porque no le conviene dar a conocer en sus profundidades cómo son, y entre los que nombro aquí apenas unos pocos, entre otros, las violencias de Estado, las desapariciones forzadas, el recorte de los derechos de mujeres discapacitadas, la guerra, las tramposas subyugaciones de los cuerpos, el borramiento de los aportes de todas quienes no obedecen al patrón de la masculinidad hegemónica, la tortura, el hambre de pueblos enteros, el establecimiento de jerarquías veneradoras de la virilidad, los distintos mecanismos de esclavización de las mujeres y de la niñez o las intentonas de supresión de la dignidad.

 

Estas capacidades que exigen imaginación y creación, provienen de modos singulares de investigación, puesta en cuestionamiento y reflexión articuladora de conocimientos, abriendo posibilidades flexibles y plurales de su activación en el espacio público, de exposición de la vulnerabilidad común y de performaticidades fuera de la norma y la costumbre.

 

Los feminismos, en sus distintas corrientes, tienen ya varios años removiendo las bases, performando, para desmontar la subjetividad que justifica y defiende la falacia del sujeto universal y del sistema patriarcal, y apropiarse, continuamente, de las posibilidades del pensamiento crítico para propagar las ideas en la calle, poniendo la pluralidad de sus cuerpos, proponiendo la justicia, produciendo continuidades nuevas entre sujetas-cuerpos, lo público y lo íntimo, entre lo individual y lo colectivo, saboteando el miedo para generar parentescos y nuevas “figuras de cuerdas” como las que nos ha estimulado a imaginar Donna Haraway.

 

Teniendo presentes estas ideas, esta convocatoria ha buscado incitar al lanzamiento de esos cuerpos-cuerdas en las distintas direcciones posibles de la revuelta, esperando poder explorar los nuevos descentramientos, enredos, provocaciones y vínculos recíprocos propuestos por las artistas. De ahí que varios enlaces hayan sido posibles en este Cuarto Encuentro Arte Mujeres Ecuador.

 

El trabajo artístico presentado desde las corporeidades y experiencias no masculinas (que no necesariamente significa hablar de cuerpos femeninos en el sentido binarista, heterosexual, blanco, capacitista o etarista), han resultado en una amplia diversidad de disposiciones en la configuración de lo colectivo, de los modos de responder ante las zonas intactas del poder, y de prolongar modos de agenciamiento y transformación de este panorama contemporáneo en el que vienen resurgiendo los fundamentalismos misóginos y otras múltiples desesperanzas pero, también, de enérgicas y multitudinarias contestaciones que nos sacuden los victimismos.

 

En esta exposición, conformada por los trabajos de diecinueve artistas y colectivos de artistas de distintas trayectorias y con propuestas de diferente talante, es posible encontrar formas de traspasar los miedos a los que históricamente han sido sometidas nuestras subjetividades, coaccionadas principalmente desde nuestros cuerpos. Y son esos mismos cuerpos los que aquí traman, desde “juegos de cuerdas” impredecibles, nuevas formas de infiltración, fisuras, amalgamas, compostas y germinaciones.

 

Algunas de las aproximaciones hechas pueden reconocerse como más asociadas a la más tradicional idea de lucha; otras en cambio están más cercanas a las búsquedas de una politización labrada desde la ternura; unas son empujadas desde colectivos que hacen y deshacen los discursos identitarios e inspiran más colectividad aún; otras están fraguadas desde lugares lácteos y un giro importante a la catalogación de “malas mujeres”; algunas están situadas en la denuncia y la confrontación que responde a la soledad y el abandono institucional, contraponiendo algún modo de amor que las sostiene; otras se han impulsado desde la rabia, el hastío, la ironía o el humor; unas más han sido concebidas a partir de un lugar de ficción que lanza hilos sutiles a ser tomados por quien los sepa atrapar, y muchas entremezclan varios de esos aspectos. Es posible reconocer aquí, en cada poética propuesta, sus capacidades singulares y, sobre todo, es esta pluralidad compleja la que se nos hace cada vez más necesaria.

 

A partir de las más cercanas afinidades, he planteado para la exposición de este Cuarto Encuentro Arte Mujeres Ecuador, seis nudos expositivos, cuyos títulos y exponentes organizó a continuación de la siguiente manera:

Legados contraperformativos

– Olga Beltrán

 

Hacer y deshacer lo identitario

– Mujeres Públicas
– Grafitodas
– Identidad Marrón
– Sisa Morán

Inscripciones lácteas y «malas mujeres»

– Sandra Vivas
– Paula Hinojosa
– Emilia González

 

Hastios y migraciones

– Jenny Jaramillo
– Alexandra Trujillo
– Karen Toro
– Maya Ponce

Ficciones, invitaciones, cuidados

– Valeria Andrade
– Pamela Suasti
– Glenda Rosero
– Kasum Iwama

 

Contraposiciones al abandono

– Magdalena Pino
– Elena Heredia
– Isabel Llaguno

Albeley Rodríguez Bencomo
Curadora invitada.

Programa Educativo

Este encuentro contó con un programa educativo para la activación de reflexiones, intercambios y la ampliación de redes sororas necesarias en un campo del arte que, aún en el siglo XXI, se sostiene sobre un paradigma patriarcal y androcéntrico. Contamos con conferencias y charlas, conversatorios, encuentros de artistas en sala, una laboratoria de performance y un taller de cine. Este programa se propuso como transdisciplinar, antidicotómica, antijerárquica y pluralista, pretendiendo así aplacar las univocidades y, al contrario, abrirse a la escucha de diversas voces sobre la curaduría feminista, las experiencias artísticas de participantes, invitadas y organizadoras, así como aquellas aproximaciones igualitarias y posibles de campos familiares del arte feminista (como lo pueden ser las publicaciones, la universidad, y/o el cine). Contamos con las generosas participaciones de las historiadoras, curadoras, artistas y cineastas:


Cecilia
Fajardo-Hill, Julia Antivilo, Maite Garbayo, Kekena Corvalán, Marcela Barreiro, Nel Acosta Bravo, Aidana María Rico, Javiera Medina y Carolina Moscoso.

El programa del Cuarto Encuentro Arte Mujeres Ecuador: Cuerpos-cuerdas. Traspasar el miedo. Prolongar la acción, se plantea como una parte importante de la activación de reflexiones, intercambios y la ampliación de las redes sororas necesarias en un campo del arte que, aún en el siglo XXI, se sostiene sobre un paradigma patriarcal y androcéntrico.

 

En esta ocasión contaremos con Conferencias y charlas; Conversatorios; Encuentros de artistas en sala y en línea; Una Laboratoria de performance y un Taller.

 

La perspectiva desde la que este programa ha sido propuesto intenta ser transdisciplinar, antidicotómica, antijerárquica y pluralista, pretendiendo así, aplacar las univocidades y, al contrario, abrirse a la escucha de diversas voces sobre la curaduría feminista, las experiencias artísticas de participantes, invitadas y organizadoras, así como aquellas aproximaciones igualitarias y posibles de campos familiares del arte feminista (como lo pueden ser las publicaciones, la universidad, y/o el cine).

Laboratoria de Performance
El poder de la compañía

Facilitadoras: Nel Acosta Bravo y Aidana María Rico

Funcionó como un laboratorio de naturaleza orgánica, que pretende indagar sobre nuestras memorias corporales-emocionales, antiguas y recientes, en tanto nuestra historia personal, familiar, grupal, femenina. Considerando y reconociendo nuestras vulnerabilidades en tanto mujeres sexo-diversas, proponemos recorrer un camino de visibilizar, empatizar, sentir y conformar un solo cuerpo que encuentra su poder en la compañía ( con lxs otrxs), en la construcción de lazos que evidencian y reconocen los sitios comunes afectados por el patriarcado, donde el mundo sensible -nuestro mundo- se articula en manada, para accionar, para mirarse, acompañarse, sostenerse y levantarse, como herremienta contínua de poder y autonomía. En este sentido, se propuso a las participantes, habitar diferentes situaciones para revisar nuestros cuerpos, desde sus particularidades, a las cotidianidades compartidas y el adentro (mundo interior) con la finalidad de sostener en una sola fuerza, nuestro cosmos y la capacidad de sacudir y accionar.

Taller de Cine PROTAGONISTAS
Constelaciones sentidos y sin-sentidos en el cine de/con mujeres.

Facilitadora: Javiera Medina

Constelaciones, sentidos y sinsentidos en el cine de/con mujeres busca imaginar otras formas posibles, otros gestos, otros cuerpos, otras relaciones, que nos permitan abrir el espectro, a través del análisis no sólo de las imágenes que proponemos, sino de sus cruces y de las fricciones posibles en un montaje que elaboramos entre todas. Esa es la invitación: decir las imágenes que vemos, compartir nuestros des-acuerdos, tender redes que nos hagan resistir más fuertes el peso de la hegemonía perversa.

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